Una de las señales acerca de que tan preparado está un país para enfrentar con éxito los retos de una economía globalizada son las áreas de conocimiento en las que se ha formado su población. 

Las áreas de conocimiento elegidas por los jóvenes de un país son una radiografía de cómo planea una nación su crecimiento y desarrollo. Países que en años recientes lograron mejorar sus niveles de bienestar fue gracias a que años atrás sus jóvenes escogieron áreas de formación relacionadas con la investigación, la generación de nuevos conocimientos y vinculadas a los campos de mayor potencial de desarrollo.

Así entonces áreas relacionadas con las ciencias básicas, las ingenierías y las relacionadas con las tecnologías de la información, han sido base para consolidar sistemas de innovación en países como Irlanda, Singapur, Finlandia y Hong Kong.

Ahora, ¿qué estudian los jóvenes en Argentina?  De acuerdo con las cifras publicadas por el Observatorio Laboral para la Educación del Ministerio de Educación Nacional, en el año 2013 el 36,5% de graduados se concentró el área de Economía, Administración, Contador y afines; con relación a carreras relacionadas con la docencia el 10% y con áreas de matemáticas y ciencias básicas no llegan al 2%.

El panorama de los graduados en Argentina muestra lo débil que aun están las ciencias básicas,  las cuales son fundamento para promover innovación y desarrollo.

Sin duda las variables del mercado laboral son un referente para escoger una carrera, es decir tanto la oportunidad de obtener un empleo, los ingresos a percibir y las posibilidades de desarrollo profesional; y con relación a carreras como física, química, biología y matemáticas no son percibidas por los jóvenes como referentes de estabilidad y desarrollo profesional.

Contrario a lo anterior, en el país dado en los últimos años el crecimiento de las actividades de minería, éstas se han constituido un referente para orientar la elección de carrera de los jóvenes dada las oportunidades de empleabilidad e ingresos. Según datos del mismo Observatorio Laboral en el año 2013 entre las  carreras con un mayor ingreso promedio en el primer empleo se encuentran Ingeniería de petróleos y geología  las cuales prácticamente duplicaron el salario promedio de las demás carreras.

Para efectos que el mayor grado de escolaridad de la población se traduzca en progreso y mejora del bienestar, no sólo se trata de aumentar tasas de cobertura de la educación superior sino que las áreas de estudio sean en campos que promuevan la generación de conocimientos nuevos, que se traduzcan en la producción de bienes y servicios de alto valor agregado, en inventos y patentes que reflejen un país de la sociedad del conocimiento y no sólo una sociedad que sigue replicando modelos de economía minera extractiva y de muy poco retorno social y desarrollo sostenible.